No te irás de esta ciudad sin unas cuantas fotos de sus lugares más emblemáticos, pero deja algo de tiempo para los panoramas más especiales y busca todo lo que no sale en las postales. Te contamos cómo observar la ciudad desde un punto de vista totalmente distinto.
El Louvre
La mayoría de los turistas van directos a la Mona Lisa, pero si visitas el museo con alguien de la zona, podrás verlo con otros ojos, lejos de las aglomeraciones y los palos selfi. Te recomendamos que compres los tickets para visitar el museo con tiempo, lo ideal es unos días antes, por que hay cientos de turistas que querrán ir el mismo día a comprar entradas, y se generan largas filas.
Montmartre
Este icónico barrio repleto de toldos a rayas, calles adoquinadas y animadas plazas se encuentra a los pies de una basílica digna de peregrinaje, el Sacré Cœur o Sagrado Corazón.
Le Marais
Le Marais desprende un encanto de otros días, mezclado con un estilo moderno en el corazón de la ciudad. Las calles adoquinadas están repletas de bares, cafeterías y boutiques que te están esperando con las puertas abiertas.
Notre Dame
Recorre la famosa catedral y la isla en la que se encuentra, «l’île de la Cité», para imaginar la vida en el París medieval.